martes, 4 de julio de 2017

Los asombrosos murales de Chilonche (1)

Murales Mayas de Chilonche - siglo VIII d.C.


Los murales de Chilonche sorprenden porque son frescos sin linea delimitadora. Muestran gestos y posiciones que no se conocen de otros murales mayas. Se desarrollaron, probablemente, casi al mismo tiempo o en el mismo Clásico Tardío, que los murales de Bonampak, pero en un estilo y temática diferente y sin tanta cercanía con la guerra. Exploran la expresividad coreografica de la escena. Sugieren la psicología de los personajes no tanto en el rostro como en las actitudes corporales. La escena primordiales una coreografia de gente con un vacio de objetos y ornamentos que no es común ver en el muralismo Maya.



En este detalle que se muestra arriba, se muestran claramente 6 personajes sin ornamentos y 2 de ellos apenas cubiertos de taparrabos blancos. El personaje negro, al centro-izquierda, en una contorsión imposible de su cuerpo, parece apenas darse cuenta de la presencia de aquel que vinieron a honrar. Aunque la escena fluye de izquierda a derecha este personaje negro de la izquierda rompe, dudoso, ese ritmo de los demás. Su compañero de atuendo, a la derecha, está mucho más inmiscuido y reverente ante el personaje que se asume al lado derecho de la escena - y que no es claro si aparece en el resto del mural.



En este otro detalle del mural, una señora con un vestido a grecas, es reverenciada por un anciano apenas cubierto por un taparrabos, apoyandose en un bastón.

La vinculación entre ambos detalles del mural, no es clara. Pero ciertamente no es un evento en el que salgan a relucir los ropajes y las jerarquias.